Si un agricultor vende sus cebollas a 0,07 euros el kilo y el consumidor final las compra a 1,10 euros el kilo, ¿dónde se queda la diferencia? ¿Por qué el consumidor está pagando un 1.571% más que el precio en origen, mientras que el productor está vendiendo por debajo de los costes de producción?
La Unión Agroganadera de Álava ya tiene una tienda de productos locales y un portal web de venta directa, pero ahora está comenzando a trabajar en la formación de grupos de consumo, un proyecto en el que los consumidores y productores serán los protagonistas.
El fin es fomentar la venta directa del productor al consumidor, sin intermediarios que engordan alarmantemente el precio en origen del producto. Un método de comercialización que ofrece la posibilidad de que el consumidor adquiera el alimento a un precio justo y que el productor pueda venderlo a un precio razonable.
El grupo de consumo tiene previsto empezar a funcionar en septiembre y www.elmercadodelosproductores.com será uno de los productores, aportando productos de los que nuestros vecinos no disponen o se les han agotado, como por ejemplo frutas, hortalizas, verduras y mermeladas de nuestros productores riojanos.
La formación de grupos de consumo es una fórmula que está en alza en los últimos años. Es una nueva opción de vida cada vez más habitual entre la población metropolitana, que triunfa en grandes urbes de Madrid, País Vasco o Cataluña.
Gracias a los cientos de cooperativas de consumo que se han creado en los últimos años, se está abriendo paso un nuevo modelo de consumo que tiene otra forma de entender la relación entre consumidor y productor, más cercana y directa, al margen de las grandes superficies comerciales, las cadenas de supermercado y las grandes franquicias internacionales.